Y caí desde no sé donde...y aún continúo cayendo.
Mi vida en una espiral que no sé donde me lleva. Giro y giro...y el aire durante la caída me roza el cuerpo...y me arrebata la ropa en cuanto hay ocasión.
Soy la otra, la que no existe.
La otra, la que sólo está en las tinieblas del deseo.
Aquí empieza la historia de esta historia inacabada...cuando a ojos de todos ni ha empezado...
Pero existe...y yo lo sé...y tú también.